jueves, 21 de abril de 2016

SORIA, OTRO NEGRÍN


Eugenio A. Rodríguez

Hay quien cree que Soria y Negrín podrían representar opciones políticas contrapuestas. De eso nada. El mismo calcetín dado la vuelta. Escribo desde la izquierda, aviso, no para defender a Soria, sino para criticar el ombliguismo de defender a los nuestros por nuestros y no por lo que son.

¿Y qué tienen en común políticos tan tenidos por contrarios? Me parece que tienen muchas cosas en común, a pesar que Soria nació cuando Negrín llevaba ya dos años muerto…

Ambos pertenecen al selectísimo grupo de canarios que han llegado a las altísimas esferas del poder. Desde el minuto uno ambos ya pertenecían al también selectísimo grupo de canarios que han podido estudiar en Europa (en aquellos tiempos). Ambos de buena familia. Ambos ambiciosos. Ambos adinerados. Ambos asiduos al lujo. Ambos expertos navegantes por las aguas de las puñaladas traperas. Ambos con actividades económicas y financieras en el extranjero. Ambos temidos en sus respectivas “ganaderías”. 

Y lo más claro. Ambos sabiendo rentabilizar la pertenencia a una región lejana. Ambos arrogándose representar a un pueblo cuando solo representaban a una oligarquía. Gran parte de la población alaba todavía a Negrín simplemente por el hecho de ser canario;  y lo mismo ha vivido Soria: hasta sus enemigos aceptaron como positivo que un canario se sentara en la mesa del gobierno Rajoy. Y el despiporre: ambos denostados por sus propios promotores. Quien avaló a Negrín para entrar en el PSOE acabó hablando muy mal de él; y el affaire Bravo de Laguna-Soria… lo mismo.

La diferencia no estriba en que uno fuera de izquierda y otro de derecha. Derecha pura y dura los dos. No encuentro más diferencia que algún aspecto de su vida privada. Seguramente Soria no se provoca el vómito para seguir tragando ni toma caprichosamente medicamentos en grandes cantidades. Cojan piedras, prefiero a Soria; desde la izquierda.

Entonces… ¿todos los políticos son iguales? ¡¡No!! Y les pongo un ejemplo de tiempos de Negrín y otro de tiempos de Soria. De antaño me quedo con Franchy Roca; de hogaño, Camilo Sánchez.